viernes, 11 de diciembre de 2015

Un pensamiento para Rita: Solsticio de invierno

Llega la Navidad, esa fecha en que celebramos el nacimiento de Jesús y lo hacemos seamos cristianos o no porque se ha convertido en tradición. Curiosamente se sabe que Jesús no nació en esa fecha ¿Por qué se celebra ahí entonces? En esas fechas se produce el solsticio de invierno que es el momento en el que las noches paran de alargarse y empiezan a crecer de nuevo los días. En muchas culturas ya era motivo de celebración, mucho antes del nacimiento de Jesús y la llegada del Cristianismo, y se vinculaba a la renovación y el renacimiento. El Cristianismo se apropia de la idea de renacimiento colocando en esa fecha el nacimiento del hijo de su dios y convirtiendo en cristianas celebraciones tradicionales anteriores a su propia existencia.
La mitología de muchas culturas está basada en ciclos naturales ligados a la tierra y a la vida, tal vez no hubiera un conocimiento científico detrás pero desde luego estaban basados en algo mucho más real y cercano que la existencia de un Dios determinista. Muchas de estas culturas buscaban el origen de la vida en la Madre Tierra, en el Sol… y desde luego científicamente hablando estaban mucho mas cerca de la realidad que explicar la vida a través de la existencia de un Dios creador. Y sin embargo, a pesar de todo, esos conocimientos inconcretos fueron convertidos en mitos e incluso fueron perseguidos y sus celebraciones fueron fagocitadas por la tradición cristiana.
Pero celebremos, la Navidad o el Solsticio de Invierno o cualquiera otra cosa que se nos ocurra, la vida siempre es motivo de celebración. Renovémonos, renazcamos y sigamos viviendo hasta que volvamos al polvo del que venimos o a que nuestro Dios recoja nuestras almas para darnos la vida eterna. Da igual en lo que creamos vivamos!