lunes, 27 de octubre de 2014

Que efímero es el paraíso.
Quiero vivir en tus sonrisas
y tus miradas perdidas,
en tus brazos, en tus ojos,
quiero vivir en tus manos.
Quiero vivir entre abrazos,
entre besos y caricias,
quiero perderme en tu cuerpo,
quiero estar en tu cabeza,
ser tú y unirme contigo,
ser yo y que me quieras.
Efímero paraíso.
Triste es volver a la tierra.
Una tierra yerma, seca, sin luz,
sin tus palabras no hay nada.
Nada, efímero paraíso,
que cuando vuelves se acaba,
dura un respiro, un aliento,
un día de sonrisas y alegrías,
un día y luego nada.
Triste vuelta a las palabras,
a las palabras escasas,
vuelta al olvido,
condenado al ostracismo,
condenado a la esperanza,
a ser solo una ventana
cuando ya no tienes nada.
Efímero paraíso, efímeras las palabras.