miércoles, 22 de febrero de 2012

Gotas de rocío en tu piel,
el aliento que se agota entrecortado,
mientras tu cuerpo parece mecerse al viento.

Ese cuerpo del deseo,
que seduce con un solo movimiento,
que desata mi pasión, mi locura, mi tormento por no poder poseerlo.
Pero hoy lo tengo al alcance de mis manos
y no me atrevo a tocarlo,
pero la tentación me puede,
la lujuria se desata y son millares de manos
las que recorren tu espalda
como un millón de mariposas que están batiendo sus alas.
y son millones de besos los que inundan tu cuello,
y dos bocas que se encuentran,
dos cuerpos que se acompasan,
alrededor ya no hay nada,
nada importa, ni tan siquiera las almas.
Es el festín de lo cuerpos,
y los nuestros se desatan,
navegan en la tormenta,
quedan flotando en la calma,
la marea nos arrastra,
no paran de llegar olas,
que rompen contra la playa.
Al final solo silencio,
nuestros ojos que se encuentran,
y también nuestras miradas,
llevo la mano a tu pelo
y juego con las palabras.

Gotas de rocío en tu piel,
un milagro entre mis manos,
nada puede ser mas bello
siendo simplemente humano.