jueves, 15 de marzo de 2012

Es curioso pero más que un vacío noto un alivio,
pensaba que iba a sufrir por como fue el final,
pero resulta que me que ni tan siquiera noto pena.
Es cierto que te sigo echando de menos,
sigo echando de menos aquellos maravillosos días,
aquella dulce luz de primavera que me acaricio hasta el verano,
es cierto si, pero también lo es que desde entonces
no habido mas caricias que las mendigadas,
y librarse de eso es un alivio,
recuperar la dignidad es un alivio,
empezarse de nuevo a amarse a uno mismo es un alivio.
Es cierto que las palabras pudieron ser más suaves,
sin devolver dolor al dolor,
ya lo intenté pero siempre me comprabas con mentiras,
supongo que tenías miedo,
espero que te des cuenta ahora de que no había razón,
de que era injustificado y tremendamente injusto.
Solo podía volar abriendo el vacío
porque tus redes de miedo
estaban dispuestas a retenerme de nuevo.
Es cierto nunca entendí nada,
y, la verdad, sigo sin entenderlo,
casi siempre lo he entendido todo,
he sabido comprender a las personas,
y tal vez fallé cuando mas lo necesitaba.
¿Y tú comprendiste algo?
Que mas da.
Me siento aliviado.
Siento que he devuelto parte de lo que he recibido.
Del amor devolví todo y más,
del dolor, a pesar de lo que creas, me he quedado corto.
Seguiré recordándote aunque no quieras,
eso no puedo evitarlo,
el tiempo dirá de que color son los recuerdos.

lunes, 12 de marzo de 2012

Quisiera escibir algo mejor pero es lo que ha salido...

A veces escribir es tan solo abrir tu corazón a las palabras,
dejar que los dedos recojan cada letra
y tiñan de color el folio en blanco.
A veces escribir es tan difícil que el blanco impoluto
se pone al mando de todos los sentidos
tiñendo de nieve el pensamiento.
A veces escribir es tan sencillo como mirar al pájaro que canta,
y escuchando la dulce melodía cadenciosa
traducir sus limpios trinos en palabras.
A veces escribir es un camino que no estás seguro adonde llega,
y caminando palabra tras palabra
te va arrastrando a su destino.
A veces escribir es una ola, con continuos vaivenes en la playa,
va y viene refrescando los sentidos
y de pronto, sin mas, desaparece.
A veces escribir es la tormenta que nace de un alma enloquecida,
y arrastra con sus ríos desbordados
hasta el último suspiro de una vida.
A veces escribir es armonioso, a veces escribir es disonancia,
a veces es del todo escandaloso,
a veces es solo una respuesta,
a veces es una palabra que se presta,
y a veces es un sueño escabroso.
A veces escribir es un deseo que se cumple impreso en una letra,
a veces con palabras sin sentido,
a veces rebosante de vacío.
A veces escribir es imposible.
A veces escribir es infinito.
A veces te pierdes escribiendo.
A veces escribir tiene sentido.

jueves, 8 de marzo de 2012

En el día de la mujer un poema de una mujer, felicidades a todas

Si soy rara...

Si soy rara por intentar sembrar en el camino semillas de alegría.
Si soy rara por sonreírle a la vida aunque me lo ponga difícil.
Si lo soy por creer que el mundo es un ser vivo que tiene derecho a recibir,
no sólo a dar.
Si lo soy por prestar oídos al pulso de la naturaleza
en lugar de a los engañosos cantos de sirena de la sociedad.
Si defiendo que la ayuda no se compra ni se vende,
sino que se presta.
Si me emociona el retorno,
cada año,
de una golondrina al nido que la vio nacer.
Si me indigna ver a una mujer con las manos ajadas de trabajo mal recompensado.
Si me duele el niño de mirada marchita
que se cruza en mi camino.
Si soy rara por pensar que a la humanidad le queda una esperanza
mientras haya una sola persona que lo crea.
Si consiguen embelesarme el sonido de una nota,
el arrullo de un mar en calma.
Si no escucho las palabras
porque me pierdo en la voz que las pronuncia.
Si soy rara por despertar,
a media noche,
con la urgencia de un verso prendido en mi boca.
Si soy rara por creer que el corazón me da la libertad y la razón me la quita.
Si soy rara por vestirme de payaso para robar una sonrisa amiga.
Si lo soy por mirarme en unos ojos con la esperanza de verme reflejada en ellos,
entonces, sí.
Entonces confieso que soy rara,
y mientras quede en mi cuerpo un soplo de vida
lucharé por seguir siéndolo y por dejar constancia de ello.

Ester Vallbona
Extraído de www.poemariodemujeres.com

miércoles, 7 de marzo de 2012

No hay finales suaves cuando se afilan las espadas,
las guerras son un sinsentido dónde todos pierden.
¿Por qué me metí esta guerra? ¿la inicié yo?
¿Por qué embestí con fiereza cuando todo estaba perdido?
Hay estocadas de muerte necesaria,
pero mil minúsculos aguijones matan lentamente.
Una gota de sangre escapando por cada pinchazo,
una gota de vida que se desvanece.
La palidez es el rostro de los muertos,
la palidez es el rostro del que se desangra.
Es cierto que es más fácil sanar de mil pinchazos
que sanar de una certera estocada,
pero cuando el destino es la muerte
es más fácil morir de un solo golpe.
Yo no inventé la guerra, solo he jugado a ella,
y he golpeado con toda la frustración,
con todas las decepciones,
con todas las traiciones,
las mentiras,
las excusas,
y por supuesto con toda mi autocompasión.
Supongo que podría haber sido mas fuerte
y dejar otra opción mas a la vida,
podría haber vuelto a esquivar el sentimiento de no ser nada,
ese sentimiento de ser lo último,
de estar detrás de todas las opciones.
Soy débil por no haber podido aguantarlo,
pero ya no siento culpa,
solo dí un único mal golpe cuando me sentía arrinconado.
Las excusas son el escudo del cobarde y las mentiras su espada,
defenderse a manos limpias es una gran desventaja,
solo dejan opción a un solo golpe certero
que con suerte acabe con todo para siempre.
¿Con suerte? No, evidentemente no es suerte,
es una desgracia, una horrible desgracia,
pero aun no soy capaz de encontrar otras opciones.
¿Hubiera sido mejor morir con las manos limpias?
¿Hubiera sido mejor sufrir eternamente esta sangría descorazonadora?
El tiempo hará que me arrepienta,
no, ya estoy arrepentido,
el tiempo solo hará que otras opciones parezcan mejores.
Tal vez lo fueran.
No hay vuelta atrás.
Seguiremos el camino con lágrimas en los ojos
y con cada vez mas barro en las botas.